Chile continúa entregando sorpresas relacionadas con patrimonio automotriz no sólo chileno; también mundial. Quién habría pensado que un cerrado y viejo galpón en la zona de Los Angeles, en el sur de Chile, contendría no uno sino que... ¡tres! Mercedes de Preguerra. Costó determinar qué modelo era, pero su dueño tuvo éxito identificando que eran nada menos que versiones limousine del escaso modelo Typ 230 (W153) construido entre 1938 y 1943.
Si bien el éxito de ventas de Daimler-Benz en esa época fue el 170 V, el modelo 230 (W 143 y 153) lo superaba desde el punto de vista técnico: Era el primer Mercedes con carrocería completamente de acero, que reemplazaba al antiguo sistema con piezas estructurales de madera (identificados por el código W143).
De igual forma, fue construido en un chasis inédito, con una novedosa estructura de tubos ovales lo cual aumentaba la capacidad de torsión, carga y resistencia del automóvil.
A pesar de sus avances, este nuevo modelo 230 fue menos valorizado por parte de los clientes alemanes, pero ello se debió a las tensiones existentes en el ambiente de preguerra y las necesidades de ahorro.
El mayor consumo de su motor era un tema de preocupación. En efecto, estaba equipado, con un seis cilindros de 2,2 litros que entregaba 55 HP. Su velocidad máxima había sido limitada, por las mismas razones de economía, a 116 km/h (72 mph).
Entre sus refinamientos, las versiones de mayor lujo estaban equipadas con lubricación central accionada a través de un pedal y el filtro de aceite giraba cada vez que se apretaba el embrague.
Debido a su concepción avanzada, este modelo se constituyó en la base para los exitosos modelos de postguerra, específicamente el 170 y el 220.
Veamos lo que su dueño nos cuenta acerca de los imponentes Mercedes, (y nada menos que versión Limousine), que encontró (y de paso, conocer algo sobre soldaduras al carburo)...